Esta no es una flor cualquiera. Tampoco se halla en un jardín cualquiera. Solo se pueden ver especímenes así en el conocido como Castillo de las Flores, la fortaleza del Margrave de Shekar. Desde los primeros años en que poseyeron el castillo, los señores de Shekar habían adornado varias zonas al sur del escarpado con jardines, bosquecillos y reservas para ciervos y otras criaturas inofensivas del bosque. Tal fue la fama que adquirieron los jardines que el propio castillo recibió su nombre gracias a la florida vegetación que había todo el año a sus pies. Años después, el quinto margrave, un poderoso hechicero conocido como Proquil el Loco, utilizó los jardines para sus perversos fines y creó mortíferas plantas carnívoras. El actual margrave, al igual que su padre, ha dejado que los jardines crezcan en estado salvaje y ahora casi nadie los visita…
Colección: Ninguna
Licencia: Todos los derechos reservados
Año de creación: 1993
Estado: VENDIDA
Tipo de obra: Pintura
Medidas (en cms)
Altura: 81
Anchura: 116
Profundidad: 2
Técnica: Otros
Soporte: Lienzo